La librería Strand de Nueva York ha reabierto después de semanas de encierro.
La librería Strand, uno de los lugares más visitados en la ciudad de Nueva York por turistas y lugareños, reabrió ayer (22 de junio) después de semanas de encierro: la cola, fotografiada por uno de los libreros, dio la vuelta a la manzana. Para los bibliófilos, esta foto es el símbolo de una buena noticia: si el libro electrónico y el déficit de atención causado por las redes sociales no tuvieron éxito, ni un bloqueo global mató a los libros en papel.
Las librerías también reabrieron hace una semana en el Reino Unido, donde la asociación comercial reportó 4 millones de libros vendidos en seis días, un aumento del 30% en las ventas de la misma semana en comparación con 2019, y satisfacción general. En Francia, un país de fuertes lectores, el gobierno ha asignado 82 millones de euros para ayudar a las librerías y editoriales; y la revista de librerías Livres Hebdo estimó un aumento en las compras de libros del 230% en la primera semana de aislamiento ( por otro lado, durante la emergencia las ventas han caído del 60%).
Las librerías se consideraron "servicios no esenciales" en casi todos los países y, por lo tanto, se cerraron durante el lockdown. La paradoja: Italia fue uno de los primeros en permitirles reabrir (e incluirlos en servicios "esenciales", antes que los peluqueros). Pero con las pérdidas infligidas por el bloqueo, que redujeron sus ingresos del 85%, muchos no han reabierto.
También en Italia soñamos con colas como la de Strand: ¿qué tan "inesencial" es leer?
Fuente: Il Corriere della Sera, (c) Irene Soave, "Qué gran comienzo: hacer cola en Strand".
Enlace a las noticias: https://www.corriere.it/NewsletterCorriere/america-cina/ac54aa3a-b5eb-11ea-9dea-5ac3c9ec7c08_nl_AmericaCina.html
Enlace a la biblioteca de Strand: https://www.strandbooks.com/
